¿Qué es?
La cebolla (Allium cepa) es una planta herbácea bienal de la familia de las amarilidáceas que se cultiva por su bulbo comestible.
La raíz de la cebolla está formada por numerosas raicillas fasciculadas, de color blanquecino, poco profundas, que pueden alcanzar una profundidad de 25 cm. Las hojas crecen de forma alterna, son largas, huecas, cilíndricas y uno de los lados de cada hoja es aplanado, pudiendo medir hasta 40 centímetros de longitud. La planta produce una inflorescencia que está formada por cientos de pequeñas flores de 6 pétalos cada una y de color blanco-verdoso a púrpura.
El bulbo, la parte principal de la cebolla, se desarrolla justo encima del tallo aplanado de la planta, tiene forma redonda o casi cónica, y su interior está formado por capas gruesas y carnosas, protegidas por membranas finas, secas, delgadas y semitransparentes.
El tamaño, color, sabor y aroma de las cebollas varía, pero las más conocidas son blancas, rojas/moradas y amarillas.
Tanto el bulbo como las hojas y flores de la cebolla son comestibles.
Las cebollas si bien son hortalizas, también actúan como una especia, añadiendo sabor a muchos platos, son baratas y abundantes y se pueden conseguir en cada cocina alrededor del mundo.
Variedades
Existe una gran variedad de cebollas y el sistema para clasificarlas más importante se basa en el color y el sabor.
Cebollas amarillas: Es la variedad que usamos con frecuencia en las cocinas. Tienen una piel marrón como de pergamino que rodea la carne de color blanco marfil, su sabor es fuerte y picante. Las cebollas amarillas son adecuadas para cualquier uso. Excelentes para la sopa de cebolla francesa.
Cebollas blancas: Tienen la piel y la carne de color blanco y su sabor es más suave y dulce que el de las cebollas amarillas. Son buenas para servirlas crudas en salsas o ensaladas.
Cebollas rojas: Tanto la piel como la carne de estas cebollas son de color rojo púrpura, su sabor es suave y dulce, buenas para comer crudas. El color las hace un buen ingrediente para ensaladas.
Cebollas de perla: Son cebollas de menor tamaño, redondas, blancas y de sabor dulce. Generalmente se conservan en vinagre y se usan como guarnición y en cócteles, aunque también se pueden servir hervidas u horneadas.
Cebollas verdes o cebolleta: Son las que no han alcanzado la madurez y no han formado un bulbo, o solo parcialmente. Su color es blanco y conserva los tallos verdes, tiernos y frescos. Su sabor es suave, y toda la cebolla, incluidos el tallo y el bulbo se usan en ensaladas, sofritos y como decoración en muchos platos, aportando color y textura.
Chalotes: Son una variedad pequeña, de bulbo alargado. Tienen una piel marrón o roja, son aromáticas y tienen un sabor suave. Son un clásico de la cocina francesa. Las hojas verdes también se pueden comer. Pueden usarse en aderezos, en ensaladas o como acompañantes de carnes y pescados.
Historia/origen
Aunque no hay pruebas determinantes, se dice que las cebollas son originarias de Asia, se encuentran entre las plantas cultivadas más antiguas y han sido utilizadas como alimento durante miles de años.
Los egipcios las daban de comer a los trabajadores que construían las pirámides y también las utilizaban en sus rituales funerarios. En la Biblia se señala que fue uno de los alimentos más anhelados por los israelitas después de salir de Egipto hacia la Tierra Prometida.
Han sido disfrutadas por la mayoría de las culturas a lo largo de la historia. Los romanos la introdujeron en Gran Bretaña y países del Mediterráneo. Los españoles las llevaron en sus viajes de conquista a las Américas, su facilidad de cultivo y el clima templado, las hizo populares entre las culturas nativas americanas.
China produce la mayor cantidad de cebollas en el mundo, seguidos por la India y Estados Unidos.
Usos en la cocina
- La cebolla es un saborizante básico en la cocina. Se utiliza como hortaliza o como especia para resaltar el sabor de muchos platos sin dominarlos.
- Las cebollas se pueden usar enteras, en rodajas, picadas o licuadas. Se pueden asar, encurtir, caramelizar, rebosar y freír.
- Se sirven crudas en ensaladas, hamburguesas, sándwiches, se usan en salsas, sofritos, guisos, sopas, granos, verduras y mucho mas.
- Para evitar que te lloren los ojos, pela las cebollas bajo agua fría o colócalas en el congelador durante unos 10 minutos antes de cortarlas.
Compra y almacenamiento
- Las cebollas están disponibles todo el año, las encontrarás en fruterías, tiendas de hortalizas y supermercados.
- Cuando compres cebollas asegúrate que su textura sea dura y firme, sin humedades o golpes y al llegar a casa debes almacenarlas en un lugar fresco, seco y a temperatura ambiente, en estas condiciones pueden durar hasta 1 mes. Las cebollas ya partidas, simplemente se guardan en un recipiente sellado en el refrigerador y deben ser usadas en los próximos 7 días.
- Las cebollas también están disponibles en varias formas procesadas, las podemos encontrar congeladas y deshidratadas; en polvo o en hojuelas, estos últimos deben almacenarse en recipientes herméticos.
Propiedades y beneficios de la cebolla
Las cebollas están compuestas principalmente por agua. Son ricas en vitaminas como la C, varias del complejo B, y minerales como el fósforo, potasio y calcio. Es un alimento que se caracteriza por su bajo valor calórico y alto contenido en fibra.
Son ricas en fitoquímicos, entre los que destaca el flavonoide quercitina, un antioxidante más potente que la vitamina E.
A lo largo de la historia se han utilizado como medicina natural para dolencias como resfriados, molestias respiratorias, dolores de oídos, quemaduras, hemorroides. Se cree que son beneficiosas para el corazón y para prevenir o controlar la diabetes. Tienen propiedades antiinflamatorias y antialérgicas, además, puede ayudar a reducir los síntomas de fatiga, ansiedad y depresión.
Valores nutricionales (por 100 gr.)
- Energía 40 kcal
- Carbohidratos 9,0 g
- Grasas 0,1 g
- Proteínas 1,1 g
- Fibra 1,7 g
- Agua 89,0 g
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