Sin quitar la piel, lava bien las papas para eliminar cualquier resto de suciedad.
En una olla o caldero coloca las papas enteras y añade suficiente agua hasta apenas cubrirlas, sin sobrepasar el nivel de la papa y añade la sal gruesa. No te preocupes que no quedarán saladas.
Coloca la olla a fuego alto, una vez comience a hervir deja cocinar a fuego medio alto con la olla tapada.
Pasados 15 minutos, pincha las papas para comprobar que están cocidas. Si están listas escurre el agua sobrante si la hubiera y devuelve las papas a la olla, colocando el fuego al mínimo.
Comienza a sacudir la olla, haciendo saltar las papas en círculo, podrás ir observando cómo se secan y se van "arrugando". Su piel tomará el característico tono blanquecino por la acción de la sal. Retira del fuego.
Están listas tus papas arrugadas. Acompaña con los típicos mojos canarios. El mojo verde de cilantro, que es más suave o el mojo rojo , que es más picante.